El metabolismo es la capacidad que tiene nuestro cuerpo de convertir los alimentos que ingerimos en energía. Un metabolismo más rápido significa que el cuerpo trabaja de un modo más eficiente quemando más calorías, por lo que el riesgo de tener sobrepeso es menor.
Nuestras circunstancias personales (edad, peso, altura, actividad física) intervienen activamente en la velocidad de nuestro metabolismo, no obstante hay algunas pequeñas pautas que pueden marcar una gran diferencia. Aquí te las enseñamos.
1. Come con frecuencia
Al contrario de lo que pueda parecer, comer acelera nuestro metabolismo. Lo ideal es comer algo cada 2/3h y realizar 5 comidas al día. No decimos aquí que vale atiborrarse, sino comer con moderación y de una manera sana. Si quieres picar, puedes elegir snacks saludables. Sobre una alimentación equilibrada, puedes leer otro post aquí.
2. Bebe agua
No nos cansaremos de decirlo, beber mucha agua es fundamental para disfrutar de una buena salud y ayudar a nuestro metabolismo a digerir mejor. 8 vasos al día es lo ideal, incluyendo en esta ingesta los tés e infusiones.
3. No te saltes el desayuno
Dicen que el desayuno es la comida más importante del día y es verdad. Nuestro cuerpo lleva muchas horas sin comer, probablemente entre 8-10h por lo que la primera ingesta debería ser nutritiva y equilibrada. Algo de fruta, café o té o tostadas pueden ser una buena opción. ¡Comienza bien tu día!
3. Mantente activo
Para el cuerpo es importante mantener una buena dosis de actividad. Además nuestro metabolismo se acostumbra a lo que realicemos por lo que es bueno cambiar cada cierto tiempo y emprender nuevas actividades. Nos hará llenarnos de energía y el cuerpo te lo agradecerá. Si no tienes tiempo de realizar ejercicio, camina, si dispones de una media hora al día, una sesión de Baile, GAP o HIIT es ideal.
4. Come mas proteina (magra)
Las proteínas ayudan a crecer al músculo por lo que deberías intentar que todas las comidas tuvieran un equilibrio proteico adecuado (cuanto más músculo tengas más calorías necesitas, más quemas y menos almacenas). Además la proteína acelera tu metabolismo. Elige alimentos con proteínas magras como el huevo, el pescado o la carne de ave. Si no te va la carne puedes comer proteína de soja, derivados lácteos o legumbres.
5. Consume más Omega 3
El Omega-3 es un gran aliado para mantener nuestro metabolismo activo. Consume pescados ricos en Omega-3 como el Salmón o el atún. Otra opción son las nueces.
6. Duerme lo suficiente
Casi más importante que la alimentación es dormir lo suficiente y con un horario más o menos regular. Dormir 8h es fundamental para mantener nuestro metabolismo activo y quemar más calorías.